ASOFAP INTERNACIONAL: EL MERCADO ESTADOUNIDENSE DE LA PISCINA PRIVADA
19/05/2015 - La Asociación Española de Profesionales del Sector Piscina (ASOFAP) quiere dar a conocer un poco más a sus socios y demás profesionales del sector de la piscina la situación internacional de esta industria. Para ello, durante las próximas semanas irá publicando en su página web breves informes, pero concisos, sobre los principales mercados extranjeros. Tras analizar en profundidad la situación del mercado español, desgranar el mercado francés y adentrarse en el mercado alemán, ahora es el turno de conocer el sector de la piscina privada de los Estados Unidos.
El sector de la piscina de los Estados Unidos es el mercado más importante del mundo en términos de piscinas privadas y spas construidos, muy por delante del resto de mercados internacionales, como consecuencia sobre todo de la extensión geográfica del país americano. Según la Association of Pool & Spa Professional (APSP) , que desde hace más de medio siglo agrupa y defiende los intereses económicos y profesionales de los fabricantes de piscinas, spas e hidromasajes, Estados Unidos cuenta con 5,1 millones de piscinas residenciales y 360.000 piscinas comerciales.
Piscinas residenciales y spas
Según datos oficiales, 2013 cerró con un crecimiento del +4,3% en cuanto a construcción de piscinas nuevas residenciales, lo que supuso un cambio radical en el histórico reciente de los Estados Unidos, que llevaba 2 años consecutivos con números negativos (-3,6% en 2012 y -3,5% en 2011), aunque fue en 2009 cuando esta industria realmente tocó fondo (-58,1% ) y desde 2006 solamente con dos años positivos: 2010 (+5,6%) y el mencionado 2013. Según las tendencias de APSP en piscinas nuevas, de las menos de 60.000 piscinas construidas en 2013 se pasaría a las 100.000 anuales en 2019.
En cuanto al segmento spa e hidromasajes (hot tub en terminología americana), las ventas en 2013 vislumbran también esa recuperación que parece gozar el ámbito de la piscina residencial. Así 2013 cerró con un balance positivo del 3,5%, tras dos años negativos (-4,9% en 2011 y -1,2% en 2012), una caída del 28,9% en 2009 y números negativos desde 2005.
Tendencias
Tras esta 'travesía por el desierto', los índices económicos de los Estados Unidos de 2013 parece que tienen continuidad en 2014. Pese a una primera mitad del año algo decepcionante, desde APSP se anunciaba un crecimiento del 3,5%, motivado por los siguientes factores o tendencias:
- La construcción de viviendas continúa creciendo un 10%.
- La remodelación o reforma de los hogares se mantiene al alza, con un 20%.
- Las viviendas nuevas continúan siendo más grandes y mejores: un 35% de ellas cuestan menos de 350 millones de dólares.
- No se espera volver a los números dorados, pero insostenibles, de 2005.
- Los propietarios continuarán tomando sus decisiones de compra (viviendas, piscinas, etc.) en función de la familia y la calidad de vida.
- El petróleo y el gas natural continuarán impulsando la economía de los Estados Unidos de forma constante.
La piscina, un bien familiar
Todo ello se traduce, según los últimos estudios de la APSP, en que un 4% de la población tiene intención de instalar una piscina en los próximos 1-2 años y un 14% espera poder hacerlo durante los próximos 5 años. Lógicamente, los esfuerzos del sector se centrarán también en disminuir ese porcentaje del 82% de personas que no están interesadas en instalar una piscina. Así mismo, y en relación al consumo de piscinas en función de la familia, son los padres con hijos adolescentes, de entre 7 y 12 años de edad (con un 12%) y de 13 a 18 años (con un 11%), los que más opciones tienen de adquirir una piscina en los próximos 1-2 años. Otro dato interesante del estudio de la APSP es que, por etnias, son los hispanos (14%) los que instalarían en 1-2 años una piscina en sus viviendas, por delante de los afroamericanos y blancos, con un 4% cada uno.
Eso sí, también hay que tener en cuenta, según la mentalidad americana, que un 46% de los propietarios de piscinas creen que tenerla no les hace ni más ni menos popular entre su comunidad, por un 31% que creen que sí y un 23% que no. Este porcentaje varía en los futuros compradores, con un 55% que creen que es indistinto, un 12% que piensan que tener una piscina les hace más popular y un 38% que no. De todo ello se deduce que el motivo principal de compra no es el de apariencia de estatus social, sino el de bienestar familiar y calidad de vida ya mencionados.
La piscina, además, ofrece un valor añadido a la vivienda. En los Estados Unidos, entre las personas que compraron una casa con una piscina, un 78% dijeron que la presencia de la piscina contribuyó a su decisión de compra la casa.
Equipamientos estrella
Teniendo en cuenta el uso familiar de la piscina, la APSP realizó una encuesta a los consumidores para conocer los equipamientos más importantes que debería tener una piscina, sea esta de nueva construcción o reformada. El Top 10 de estos productos son:
- Limpiafondos automático.
- Zona de asientos.
- Cubierta de seguridad
- Sistema de limpieza automatizado.
- Cubierta solar.
- Sundeck.
- Clorador salino.
- Iluminación.
- Jets y sprays.
- Cascadas y fuentes.
Satisfacción y usos
Se tenga el equipamiento que se tenga, el consumidor estadounidense está muy satisfecho con su piscina. En otra encuesta de la APSP, un 76% de los propietarios de una piscina afirman estar "muy satisfechos" con ella, y un 96% de los dueños "satisfechos". Entre las razones apuntan que es el lugar perfecto para reunirse y pasar más tiempo con la familia, y que otros usos son el descanso, el entretenimiento, las celebraciones y el ejercicio. Lo mismo sucede con los spas. Un 57% de los propietarios sienten que su bañeras de hidromasaje estimula el entretenimiento y la relación con sus familiares y amigos, mientras que un 77% creen que es de los pocos lugares en los que son capaces de desestresarse.
Para finalizar, desde APSP reconocen que construir o adquirir una piscina o spa es una inversión seria, pero que si se tiene en cuenta el gasto medio de una familia de 4 personas en sus vacaciones de verano (unos 4.750 dólares al año), esta compra es asequible, teniendo en cuenta el tiempo de disfrute de la piscina o spa, incluso en los veranos que una familia no pueda irse de vacaciones.
